La relación de Irán con los nuevos gobernantes de Siria está condicionada por su actitud hacia Teherán, afirmó el miércoles Ali Lariyani, el principal asesor del Líder de la Revolución Islámica de Irán, y miembro del Consejo de Discernimiento de Conveniencia iraní.
El funcionario añadió que Teherán está plenamente dispuesto a fortalecer la relación, siempre y cuando el nuevo liderazgo sirio defienda la unidad territorial y se comprometa a garantizar los derechos de todo su pueblo de forma democrática.
En ese caso, puede contar con el respaldo de Irán, señaló Lariyani, quien consideró que las reuniones políticas llevadas a cabo en la capital siria han sido, principalmente, “gestos políticos”.
Asimismo, declaró que el régimen sionista piensa que puede dominar a los pueblos de la región con mano dura, pero “la conciencia del pueblo sirio se profundizará y se opondrá al comportamiento opresivo de Israel”
Desde la perspectiva del asesor iraní, Siria se ha convertido en un entorno convulso: una nación fragmentada donde unos se han apropiado de partes de su territorio y otros dominan sus recursos petroleros. Sin embargo, los diversos sectores de la población con influencia y capacidad de decisión exigen el respeto de sus derechos.
Previamente, el secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, Ali Akbar Ahmadian, había condenado los ataques de la entidad sionista en Siria y alertado sobre la posible formación de una nueva Resistencia en el territorio sirio en los próximos años.
El pasado 27 de noviembre, los grupos insurgentes apoyados por el extranjero y liderados por Hayat Tahrir al-Sham (HTS) lanzaron una ofensiva relámpago contra el Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad. Luego, los armados se apoderaron de varias ciudades clave en Siria hasta llegar el 8 de diciembre a Damasco, la capital.
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