Desde la tribuna de la 74.ª sesión de la Asamblea General de Naciones Unidas (AGNU), Rusia lanzó duras críticas contra el anfitrión del evento.
El canciller Serguéi Lavrov acusó a Washington de causar un daño enorme al sistema global de estabilidad estratégica al salir del tratado conocido como Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF, por sus siglas en inglés). En esta línea, presentó un proyecto de resolución para reforzar el sistema de control de armas.
Lavrov reprochó también a Estados Unidos por su injerencia en países soberanos como Venezuela, así como por su retirada unilateral del acuerdo nuclear con Irán y agravar la situación en el Golfo Pérsico.
Otro principal rival de Estados Unidos en materia económica y militar, hizo sonar las alarmas sobre el unilateralismo y el proteccionismo de la Casa Blanca. China dijo que los aranceles y las disputas comerciales podrían hundir al mundo en una recesión. Instó a la Administración de Donald Trump a sacar lecciones de la Gran Depresión, una aguda crisis financiera mundial que se originó en EE.UU. y que se prolongó durante la década de 1930.
El canciller chino, Wang Yi, no se limitó en las críticas y amenazó que si EE.UU. sigue actuando de mala fe, el gigante asiático adoptará las respuestas necesarias.
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