La Célula de Información de Seguridad, afiliada a la oficina del primer ministro iraquí, anunció en un comunicado que tres cohetes Katyusha fueron lanzados el martes por la noche (hora local) desde las orillas del río Tigris hacia la casa del jefe parlamentario, Muhamad al-Halbusi, en el distrito de Gurma, de la provincia occidental de Al-Anbar, a unos 50 kilómetros al oeste de la capital, Bagdad.
Uno de los misiles impactó el área adyacente de la casa, hiriendo a dos niños, que según la Policía iraquí, fueron llevados al hospital.
Una fuente de seguridad, que habló en condición de anonimato, afirmó a la agencia de noticias AFP que en este ataque “dirigido” contra el presidente del Parlamento iraquí, los tres cohetes cayeron a unos “500 metros” de su casa. Sin embargo, la fuente agregó que no estaba claro si Al-Halbusi se encontraba en el lugar en el momento del ataque.
Por el momento, ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad del incidente.
El presidente iraquí, Barham Salih, ha condenado en una nota publicada en Twitter el “ataque terrorista deplorable” contra este dirigente iraquí e invitó a la nación iraquí a “permanecer unida frente al terrorismo” y a las distintas facciones políticas a “formar un gobierno que refleje las ambiciones y aspiraciones de todos los iraquíes lo antes posible”.
El ataque se produce horas después de que el Tribunal Supremo de Irak confirmara la reelección de Al-Halbusi como presidente del Parlamento tras las polémicas elecciones legislativas que se llevaron a cabo el 10 de octubre de 2021.
En las mencionadas elecciones, el Movimiento Sadr, liderado por Muqtada al-Sadr, encabezó el conteo de votos, con 73 de los 329 escaños del Parlamento iraquí. La coalición, dirigida por Al-Halbusi, ocupó el segundo lugar, con 34 asientos; y el partido del expremier Nuri al-Maliki, el Partido Islámico Dawa (Llamado), el tercer lugar con 34 curules, según los datos oficiales anunciados por la Comisión Electoral de Irak.
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