Tras la aprobación de una comisión en la Organización de los Estados Americanos (OEA) para dar seguimiento a la situación que atraviesa Nicaragua desde abril de 2018, la que tendrá como misión presentar un informe en los próximos 70 días, el Gobierno de Nicaragua calificó esa decisión como un acto injerencista por parte de esa organización.
Para algunos diputados, Nicaragua es soberana e independiente y ninguna organización internacional tiene el derecho de inmiscuirse en los asuntos internos de esta nación.
El diputado sandinista, Luis Barbosa, asegura que a pesar de las amenazas de imponer más sanciones en contra de Nicaragua al no aceptar la comisión creada por la OEA, el Gobierno seguirá firme en defensa de la soberanía nacional.
La Administración de Daniel Ortega sostiene que Nicaragua lucha por recuperar su estabilidad y la paz, misma que aseguran se logrará en consenso nacional, sin injerencia internacional.
Moisés Mercado, Managua.
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