Según los medios israelíes, un comandante adjunto de una brigada del ejército israelí murió en “un incidente de seguridad” en el barrio de Tel al-Sultan de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza.
Cuatro soldados resultaron heridos, tres de ellos de gravedad, cuando los combatientes palestinos les dispararon con un RPG en Rafah, según los informes.
Los medios de comunicación sionistas han clasificado este viernes como un día negro para los militares del régimen.
En este contexto, el ministro israelí de asuntos militares, Israel Katz, ha confirmado que Israel está sufriendo grandes perdidas en la guerra.
Transcurridos 18 meses del inicio de la guerra genocida israelí en Gaza, los movimientos de Resistencia palestinos siguen sorprendiendo con ataques a las tropas israelíes dentro del enclave y en operaciones con misiles contra ciudades situadas en la profundidad de la Palestina ocupada.
La oposición israelí tacha de un fracaso total la guerra en Gaza y acusa al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de prolongar el conflicto para garantizar su supervivencia política.
El genocidio israelí en curso provoca un panorama cada vez más precario para la población de Gaza, que ha perdido desde octubre de 2023 a más de 51 439 personas debido a los ataques de las fuerzas sionistas. De igual manera, una cifra superior a los 117 416 palestinos ha resultado heridos.
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