Unos 200 migrantes deportados desde EE.UU. han sido recibidos en Costa Rica luego de un acuerdo alcanzado con el Gobierno de Donald Trump para recibirlos extrajudicialmente, una situación que preocupa e indigna a diversas organizaciones sociales en el país.
Este tipo de acuerdo, que también fue alcanzado con El Salvador, abre la puerta para la trata de personas que se mantienen retenidas en los países sin haber cometido delito alguno.
La cancillería de Costa Rica afirma que ya al menos unos 80 de los detenidos fueron enviados a sus países de origen.
Un acuerdo bajo la mesa que pone a Costa Rica entre los países de Centroamérica que estarían violando los derechos humanos fundamentales, al tener estas personas detenidas extrajudicialmente por complacencia del gobierno de Estados Unidos.
Mauricio Hinostroza, San José.
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