“Sé que hay gente diciendo que estos documentos no son auténticos. Puedo confirmar (…) que estos documentos son reales, son auténticos”, comentó el lunes el jefe de la Diplomacia estadounidense en alusión a una serie de papeles y cds que el premier israelí presentó horas antes, afirmando que son pruebas que demuestran sus acusaciones contra Teherán.
Pompeo, que hasta la semana pasada fue director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), dijo que ya había abordado este asunto durante la reunión mantenida el domingo con Netanyahu en Tel Aviv, en los territorios ocupados palestinos, en el marco de su gira por el Oriente Medio: una gira marcada por sus declaraciones antiiraníes.
El alto diplomático estadounidense alegó que los datos muestran que Teherán ha mentido sobre la naturaleza pacífica de su programa nuclear y que “ha estado ocultando de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) y del mundo entero un enorme archivo nuclear”.
El “show infantil” del régimen de Israel, como lo catalogan las autoridades iraníes, se produce unos días antes de la fecha límite propuesta por el presidente estadounidense, Donald Trump, para decidir si abandona o no el pacto nuclear firmado en 2015 entre Irán y el G5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania).
Pero, según muchos de los defensores del acuerdo nuclear, se trata de viejos documentos sobre un supuesto programa iraní ya aireados por Netanyahu ante las Naciones Unidas (ONU) en 2012 y que el mundo ya desestimó, por lo tanto no prueban ninguna violación del pacto de 2015.
Sé que hay gente diciendo que estos documentos no son auténticos. Puedo confirmar (…) que estos documentos son reales, son auténticos”, comenta el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, en alusión a una serie de documentos presentados por el primer ministro del régimen de Israel, Benyamin Netanyahu, sobre un supuesto desarrollo de armas nucleares por parte de Irán.
Pompeo informó, además, de que abordará el asunto con los otros países firmantes del convenio nuclear. “Voy a consultar a los aliados en Europa y otros países sobre los pasos que tenemos que dar después de lo que nos hemos enterado”, comentó Pompeo en su declaración.
Lo curioso es que el propio Pompeo reconoció antes en unas declaraciones ante el Congreso estadounidense que “el programa nuclear de Irán es pacífico y lo será”. Contrariamente, tanto EE.UU. como el régimen de Tel Aviv poseen ingentes almacenes de armas nucleares y siguen adelante con sus proyectos para desarrollarlas, en clara violación de la normativa del Tratado de No Proliferación (TNP).
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