“Después de 45 días de intensos combates, Israel no ha logrado ocupar ni una sola aldea libanesa”, ha destacado este lunes el responsable de relaciones con los medios del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Muhammad Afif, durante una conferencia de prensa en el barrio de Dahiya, en el sur de Beirut, capital libanesa.
Ha resaltado que la determinación de los combatientes de Hezbolá y su profundo conocimiento del territorio han sido los elementos decisivos en el campo de batalla.
Afif ha repudiado las afirmaciones del exministro de asuntos militares del régimen israelí, Yoav Gallant, sobre el supuesto agotamiento de las reservas de misiles de Hezbolá.
“Nuestras reservas de misiles están completas tal como estaban el primer día [de la lucha contra el régimen israelí]”, ha aseverado, citando como prueba de su afirmación el continuo lanzamiento de proyectiles por parte de la Resistencia libanesa hacia las ciudades de Tel Aviv y Haifa en los territorios palestinos ocupados.
“Hezbolá sigue aumentando sus arsenales de misiles tanto en cantidad como en calidad”, ha agregado e indicado que los combatientes de la resistencia “tienen suficientes armas y suministros para una guerra prolongada en todos los frentes”.
En este contexto, el funcionario ha aclarado que Hezbolá “no acepta la derrota” y que, a su juicio, la victoria incluye impedir la realización de los objetivos políticos y militares del enemigo.
Además, ha señalado que son los combatientes de la Resistencia los que determinan las realidades del campo de batalla, añadiendo que el destino de toda la región de Asia Occidental también estará determinado por la perseverancia y los esfuerzos de dichos combatientes.
El funcionario de Hezbolá ha hecho énfasis en que el régimen israelí ha sufrido la derrota en todo el mundo y ante la opinión pública internacional, y como ejemplo ha citado la solidaridad internacional con la causa palestina, destacando lo que sucedió hace unos días en Ámsterdam, capital neerlandesa.
El enfrentamiento cruzado entre Hezbolá e Israel, desatado hace un año, ha entrado en una nueva etapa desde que a finales de septiembre pasado el régimen sionista iniciara una campaña de intensos bombardeos aéreos sin precedentes contra el sur y el este del Líbano, incluida Beirut.
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