“Esta situación es extremadamente peligrosa y preocupante. Puedo decir que estamos prácticamente en una guerra en toda regla”, destacó el lunes Josep Borrell a los periodistas en Nueva York, donde se celebra la 79ª sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU).
Al hacer alusión al intercambio de fuego entre las fuerzas israelíes y el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Borrell cuestionó “si esto no es una situación de guerra, no sé cómo llamarla”.
El titular de la UE aseveró que este ente internacional sigue intentando reducir las tensiones entre las dos partes.
Al resaltar que los civiles están pagando un alto precio, Borrell declaró que son necesarios todos los esfuerzos diplomáticos para evitar una guerra en gran escala. “Aquí en Nueva York es el momento de hacerlo. Todo el mundo tiene que poner toda su capacidad para detener este camino hacia la guerra”, agregó.
El lunes, el ejército del régimen sionista comenzó ataques masivos en diferentes áreas del sur de El Líbano, en las que al menos 492 perdieron su vida y unos 1645 resultaron heridos.
En respuesta a estos ataques, Hezbolá atacó con misiles las bases clave y otros objetivos israelíes en represalia por los nuevos ataques letales de Israel en El Líbano. Además, los misiles de Hezbolá llegaron a los asentamientos israelíes en la Cisjordania ocupada, incluidos Rehelim, Salfit, Qalqilya y Yenín.
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