El tiempo se agota para los niños y niñas de la Franja de Gaza a medida que llegan noticias de que están empezando a morir a causa de la desnutrición, indica la organización benéfica en una declaración.
“Lo que estamos presenciando en Gaza es una matanza masiva de niños y niñas a cámara lenta porque no queda comida y no les llega nada. Están muriendo porque el mundo no les ha protegido, y ahora las familias huyen hacia el próximo objetivo militar de Israel para evitar morir de hambre, atrapadas en una trampa mortal”, denunció Jason Lee, director de Save the Children en el Territorio Palestino Ocupado.
El director de Save the Children explicó, además, que “la única manera de poner fin a esto —de mantener con vida a los niños y a las familias— es un alto el fuego inmediato y definitivo y el aumento inmediato de la ayuda humanitaria sin restricciones. Sin todo esto, una respuesta significativa dentro de Gaza es imposible y los niños seguirán muriendo”.
Save the Children, por ello, ha pedido un alto el fuego inmediato y definitivo para salvar y proteger las vidas de los niños y niñas de Gaza y que todas las partes en conflicto se adhieran al Derecho Internacional Humanitario, acaten la sentencia de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y se abstengan de llevar a cabo acciones que socaven las medidas provisionales indicadas por la Corte de La Haya.
La organización, además, ha hecho un llamamiento a todos los gobiernos donantes y al resto de la comunidad internacional para que reanuden y aumenten la financiación de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA, por sus siglas en inglés) lo antes posible.
Esta semana, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) ha dicho que hay alimentos almacenados en las fronteras de Gaza, pero no pueden entrar en el enclave y llegar de manera segura a la población devastada debido a los bombardeos implacables de Israel, que se han cobrado hasta el momento más de 30 000 vidas civiles.
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