Los manifestantes partieron desde la plaza Rabin hacia el complejo de defensa Hakirya, coreando consignas como "No a los puestos de control - sólo la paz es una solución".
Además, a través de pancartas en alto, han criticado las políticas del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, para gestionar el conflicto, además de instarle a reanudar las conversaciones de paz con los palestinos.
El líder del movimiento israelí 'Paz Ahora', Yariv Oppenheimer, durante la marcha ha acusado al régimen israelí de "librar una guerra religiosa innecesaria", mientras que todo el pueblo está pagando el precio. El ejecutivo israelí, asegura Oppenheimer, ha convertido a los territorios palestinos ocupados en un lugar "violento, racista y sin esperanza".
Por su parte, Zehava Gal-On, líder del partido Meretz, se ha dirigido a la multitud, diciendo: "Bibi, has fallado (….) Tú has fracasado en proponer cualquier tipo de visión de cambiar la realidad".
Los israelíes han organizado esta marcha tras tres semanas de duros enfrentamientos entre los palestinos y las fuerzas de seguridad israelíes en los territorios palestinos ocupados.
Con la mediación de Washington y tras tres años de interrupción, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y el régimen israelí retomaron los llamados diálogos de paz en julio de 2013, pero se volvieron a detener por la insistente medida colonizadora del régimen de Tel Aviv.
El primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, suspendió formalmente las llamadas conversaciones de paz el 24 de abril de 2014, insistiendo en sus políticas expansionistas en los territorios ocupados palestinos.
La máxima tensión en los territorios ocupados palestinos durante las últimas semanas se debió a los asaltos de militares israelíes y de la profanación de la Mezquita Al-Aqsa, en Al-Quds (Jerusalén), por parte de colonos y fuerzas del régimen de Tel Aviv.
Tras estos incidentes, el pasado 9 de octubre, el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) llamó a la nación palestina a lanzar una Intifada (“levantamiento”) con el fin de “liberar Al-Quds” de décadas de ocupación bajo el régimen israelí.
Hasta el momento, al menos 55 palestinos han muerto a manos de efectivos israelíes en lo que ha transcurrido del mes de octubre. En el caso más reciente, ocurrido este sábado, fuerzas militares israelíes han asesinado a un joven palestino en la ciudad cisjordana de Yenín, so pretexto de haber intentado apuñalar a un guardia.
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