“La situación actual es alarmante, ya que el régimen israelí amenaza a otros países de la región con la aniquilación nuclear y su arsenal nuclear plantea una amenaza importante a la paz y la seguridad regionales y mundiales”, alertó el miércoles el embajador y representante permanente de Irán ante las Naciones Unidas, Amir Said Iravani, al dirigirse a la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) en el Día Internacional contra los Ensayos Nucleares.
En este sentido, recordó que la conmemoración de este día es “una oportunidad para que la comunidad internacional obligue al régimen israelí a adherirse sin demora al (Tratado de No Proliferación Nuclear) TNP sin condiciones previas y de someter todas sus instalaciones nucleares a las salvaguardias totales de la (Agencia Internacional de Energía Atómica) AIEA”.
Se calcula que Israel posee entre 200 y 400 ojivas nucleares en su arsenal, lo que lo convierte en el único poseedor de armas no convencionales en Asia Occidental. El régimen israelí se ha negado a permitir inspecciones de sus instalaciones nucleares por parte de la AIEA y a firmar el TNP.
Además, Iravani reiteró en su discurso la importancia del compromiso de la comunidad internacional de proteger el medio ambiente de los efectos destructivos de los ensayos nucleares y poner fin a los ensayos de armas nucleares, lo que, según dijo, es esencial para lograr un mundo libre de armas nucleares.
En el evento, expresó que este día es una conmemoración de las víctimas de los ensayos nucleares: los pueblos que sufrieron, sufren y seguirán sufriendo debido a los efectos duraderos de la lluvia radiactiva; pueblos que en su mayoría no eran ciudadanos de los países que realizaron los ensayos nucleares.
Ante tal panorama, subrayó que en conmemoración de este día se debe dirigir la atención principalmente a los Estados poseedores de armas nucleares, ya que poseen la capacidad de realizar tales ensayos, con aproximadamente 2000 ensayos realizados desde 1945, incluidos 1054 realizados por Estados Unidos solamente.
Iravani aseveró que los Estados poseedores de armas nucleares deben adoptar medidas prácticas para detener todo tipo de ensayos de armas nucleares, y firmar y ratificar sin demora el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (TPCE).
También destacó la importancia de la eliminación total de las armas nucleares como “única garantía absoluta contra la amenaza o el uso de estas armas inhumanas”.
“Como signataria del TPCE, la República Islámica de Irán considera que este tratado constituye un paso hacia el desarme nuclear y, en este contexto, cree que no puede sustituir a la eliminación total de las armas nucleares”, resaltó.
En consecuencia, es esencial que la comunidad internacional mantenga el desarme nuclear como “máxima prioridad”, enfatizó, añadiendo que todas las formas de pruebas nucleares deben ser “inequívocamente prohibidas”.
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