Ante el brutal ataque del ejército sionista al hospital Kamal Adwan, el Movimento de la Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) denuncia la sistemática agresión sionista en Gaza y la considera como una afrenta a la humanidad, las costumbres y las reglas internacionales.
El movimiento palestino ha llamado a los países árabes e islámicos, además de las Naciones Unidas, a imponer sanciones preventivas a Israel para detener su máquina de guerra asesina.
En reacción al ataque instigado por el ultraderechista ministro de seguridad interna, Itamar Ben-Gvir, a la mezquita de Ibrahimi en Hebrón, HAMAS insiste en que el régimen ocupante avance en sus planes criminales contra la Cisjordania ocupada para judeizar los lugares sagrados islámicos y cristianos, incluido en Al-Quds (Jerusalén).
La Resistencia palestina hace hincapié en que es necesario que la población de Cisjordania se levante ante las acciones peligrosas de los sionistas, rompiendo el ciclo de terrorismo y arrogancia. Asimismo, le urge a enfrentar a los invasores y colonos sionistas, obligándolos a rendir cuentas por sus crímenes.
El viernes, mientras los colonos sionistas atacaban la mezquita de Ibrahim, junto a Ben-Gvir, los soldados del régimen ocupante cerraron las entradas a la ciudad de Hebrón.
Las autoridades palestinas han advertido que los repetidos asaltos de colonos judíos a los lugares sagrados musulmanes y los incendiarios llamamientos de ministros israelíes, entre ellos Ben-Gvir, a ocuparlos o convertirlos en sinagogas, son “intentos por arrastrar a la región a una guerra religiosa que acabará con todo”.
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