Las organizaciones locales identificaron a la nueva víctima como Ahlam al-Nafed, quien recientemente reportó desde el sitiado Hospital Indonesio en el norte de Gaza para el medio independiente Drop Site News y otros medios de comunicación.
Al-Nafed fue asesinada el martes mientras caminaba hacia el Hospital al-Shifa, el complejo médico más grande y hospital central de la Franja de Gaza, ubicado en el barrio Rimal en el norte de la ciudad de Gaza.
Another Journalist Killed in Gaza
— VOiCE OF MEDIA (@voiceofmedia1) January 14, 2025
Journalist Ahlam Al Nafed, who had been covering the carnage in northern Gaza for the past 100 days, was killed in Israeli air strikes today. Ahlam was a journalist, photographer and nurse documenting the carnage in Gaza. She collected evidence… pic.twitter.com/fpbMreuZbB
Durante los últimos 100 días, hizo una crónica del genocidio en el norte de Gaza, capturando evidencia de los crímenes de guerra israelíes desde el asediado Hospital Indonesio.
“A través de sus palabras e imágenes, ella se aseguró de que atrocidades que podrían haber sido silenciadas salieran a la luz, permitiendo que el mundo fuera testigo de la brutal realidad que se desarrolla allí”, escribió Drop Site News en un comunicado publicado el martes en su cuenta X.
También subrayó que el trabajo de Ahlam para documentar los ataques al Hospital de Indonesia era irremplazable.
Por su parte, el Hospital de Indonesia dijo que, “Ahlam documentó con valentía el genocidio en el norte de Gaza, residiendo en el centro médico durante el asedio, tomando pruebas de los crímenes de guerra y dando testimonio para contar la historia con sus fotografías y sus palabras, muchas de las cuales compartimos con ustedes”.
Los periodistas que trabajan en territorio palestino enfrentan mayores riesgos al cubrir la guerra genocida, en particular a la luz de los ataques terrestres y aéreos israelíes, así como desafíos como las comunicaciones interrumpidas, la escasez de suministros y los cortes de energía.
Ante estas dificultades, los periodistas palestinos han seguido documentando las atrocidades de la guerra, actuando como los ojos y oídos de la comunidad mundial a lo largo de una de las guerras más mortíferas del siglo XXI.
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