El régimen israelí, desde el inicio de la guerra genocida en Gaza en octubre de 2023, consideraba cualquier lugar no militar como un objetivo legítimo. Por esta razón, los hospitales y centros de atención médica fueron ampliamente bombardeados por este régimen, y más de mil miembros del personal sanitario perdieron la vida en servicio al pueblo.
En este contexto, con el aumento de las esperanzas de que la guerra en Gaza llegue a su fin debido a un acuerdo de alto al fuego entre las partes, las organizaciones internacionales están proporcionando sus estimaciones sobre la devastación sufrida por este enclave a manos de las fuerzas militares sionistas.
En este sentido, el responsable de la OMS para los territorios palestinos, Rik Peeperkorn, afirmó el jueves en una conferencia de prensa que se necesitarán “más de 3000 millones de dólares para el primer año y medio y 10 000 millones para los próximos cinco a siete años”.
El funcionario del organismo internacional puso de manifiesto que tales cifras no le sorprenden porque “las necesidades son masivas”.
“Sabemos que las destrucciones en Gaza son masivas. Nunca he visto algo así en mi vida”, insistió, añadiendo que la reconstrucción de Gaza es una “responsabilidad colectiva de los Estados miembros” de la OMS, incluido el mismo régimen de Israel.
Por su parte, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, destacó en la misma conferencia de prensa que “menos de la mitad de los hospitales de Gaza están operativos”.
Sin embargo, puso de relieve que el acuerdo anunciado el miércoles para un alto el fuego en la Franja de Gaza y la liberación de los retenidos “es casi la mejor noticia que podíamos esperar para comenzar el nuevo año”.
El acuerdo, que se espera que entre en vigor el próximo domingo, contempla la liberación de retenidos israelíes en Gaza y un intercambio de prisioneros, implementándose en tres fases con una tregua inicial de seis semanas.
hnb