En un discurso el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ha destacado las características y roles del teniente general Soleimani, comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI), que fue asesinado el 3 de enero en un ataque estadounidense selectivo en Bagdad (capital iraquí).
El ayatolá Jamenei ha resaltado el papel “sobresaliente” que desempeñó el general Soleimani en la neutralización de los complots estadounidenses contra países regionales, como Irak, Siria y El Líbano.
En caso de Irak, el ayatolá Jamenei ha hecho notar que EE.UU. quería que Irak tuviera un gobierno títere como el que tenía Irán durante su era monárquica —que terminó con la Revolución Islámica en 1979— o rige en la actual Arabia Saudí, para así controlar países llenos de petróleo.
Sin embargo, los iraquíes “valientes” y “fieles” hicieron frente al complot norteamericano y, en este marco, el general Soleimani ayudó como “un asesor activo” a este amplio frente antimperialista. Semejante escenario se produjo también en Siria y en El Líbano, recalca.
En cuanto a El Líbano, los estadounidenses buscan, en vano, eliminar el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) para que los libaneses se queden “indefensos” ante el régimen israelí, que sueña con ocupar hasta Beirut, capital libanesa. Hezbolá, de acuerdo con el Líder iraní, funciona hoy en día como los ojos y las manos de El Líbano, es decir, “el factor principal de la independencia libanesa”.
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