• Se cumple el 40º día del martirio del líder de Hezbolá Seyed Hasan Nasralá
Publicada: martes, 5 de noviembre de 2024 18:54

Hoy se conmemora el cuadragésimo día del martirio de Hasán Nasralá, líder de Hezbolá del Líbano, quien fue asesinado en un bombardeo israelí en Beirut.

Su muerte ha provocado una profunda conmoción en la región, pero también ha reafirmado el compromiso del eje de la Resistencia frente a Israel.

Se cumplen 40 días desde el martirio de Seyed Hasan Nasralá, secretario general del Movimiento de la Resistencia Islámica del Líbano, quien fue asesinado el 27 de septiembre en un ataque aéreo israelí en Beirut, capital libanesa. Nasralá, cuyos discursos atraían la atención de toda la región y más allá, ha sido durante mucho tiempo un miembro destacado del Eje de la Resistencia. Fue una figura influyente en la política de Asia Occidental. El líder mártir de Hezbolá contaba con un amplio apoyo entre los libaneses. Este apoyo se atribuye en parte a que Hezbolá se consolidó como una fuerza política y militar clave en la zona, proporcionando dos décadas de paz en el país árabe.

El legado de Nasralá se caracteriza por su firme defensa del pueblo palestino y su compromiso inquebrantable con la resistencia contra Israel. Desde el 7 de octubre de 2023, reafirmó su apoyo a la Resistencia palestina y elogió la operación de Hamás contra el régimen sionista, describiéndolo como un acto heroico. Además, el 8 de octubre, Hezbolá inició ataques contra posiciones israelíes a lo largo de la frontera entre Líbano y los territorios ocupados, en solidaridad con los palestinos.

La muerte de Nasralá es un golpe duro para gran parte del mundo árabe. Sin embargo, su martirio ha fortalecido a los combatientes de la Resistencia libanesa, quienes ahora enfrentan a las fuerzas israelíes con una precisión y ferocidad sin precedentes. Tras su martirio, los combatientes de Hezbolá han intensificado sus operaciones contra objetivos israelíes, mostrando una renovada determinación.

El mártir Nasralá, quien lideró Hezbolá desde 1992, fue una figura clave en la Resistencia contra la ocupación israelí en Líbano. Bajo su liderazgo, Hezbolá llevó a cabo una serie de operaciones que culminaron en la retirada de las fuerzas israelíes del sur del Líbano en 2000, después de 22 años de ocupación. En 2004, negoció un intercambio significativo que resultó en la liberación de cientos de prisioneros libaneses y árabes. Por otro lado, durante la guerra de 2006, Hezbolá infligió una derrota significativa a las fuerzas israelíes, lo que no solo aumentó la popularidad de Nasralá entre los libaneses, sino que también lo convirtió en un símbolo de resistencia en el mundo árabe.

hae/tmv