En declaraciones ofrecidas antes de abandonar Teherán (capital iraní) rumbo a Doha para realizar una visita oficial a Catar y participar en la Cumbre del Diálogo de Cooperación Asiática, el mandatario iraní ha expresado este miércoles su esperanza de llegar a un consenso sobre la seguridad de la zona y lograr la unidad necesaria para mantener a los enemigos alejados de la codicia de crear caos en la región de Asia Occidental.
Ha afirmado que va a abordar con los países asiáticos sobre la situación crítica en la región, los crímenes de Israel, su falta de respeto a las leyes internacionales y sus ataques contra las personas inocentes.
“Si el régimen sionista no pone fin a sus crímenes, será testigo de una reacción más dura”, ha aseverado el presidente iraní.
Pezeshkian ha declarado que en su viaje a Catar también busca reforzar las relaciones de los dos países en los campos económico, social, cultural y de inversión. Ha anunciado que se firmarán memorandos de entendimiento al respecto.
El viaje de dos días del titular iraní se realiza por la invitación oficial del emir de Catar, el sheij Tamim bin Hamad Al Thani, y un día después de que Teherán llevara a cabo una operación de represalia bajo el nombre de “Verdadera Promesa II” contra el régimen israelí.
El martes por la tarde, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán lanzó una andanada de misiles balísticos de largo alcance contra bases militares y de inteligencia clave israelíes en la Palestina ocupada, en respuesta al asesinato de los principales líderes de la Resistencia —Ismail Haniya, jefe del Buró Político del movimiento palestino HAMAS, y Seyed Hasan Nasralá, secretario general de Hezbolá de El Líbano— y Abás Nilforushan, un alto comandante del CGRI, por parte del régimen sionista.
La fuerza élite iraní aseguró que el 90 % de los misiles disparados alcanzaron sus objetivos con éxito.
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