Con el propósito de enviar un mensaje a la ciudadanía y oposición estadounidense, el presidente Obama convocó a la prensa para hablar de los logros obtenidos en los diálogos nucleares. Pero el presidente continúa recibiendo críticas de sus adversarios políticos.
La campaña en busca de convencer al Congreso comenzó más temprano con una visita del vicepresidente Joe Biden a la bancada demócrata con el propósito de asegurar su apoyo ante el objetivo republicano de rechazar la conclusión y cuya campaña se extendió a los medios de comunicación.
En un lenguaje coloquial, Obama dijo que las críticas a la conclusión de los diálogos son vacías y carentes de objetividad.
Si los legisladores opositores logran una súper mayoría para revertir el anunciado veto presidencial, el panorama se le complicaría a la Administración, pues el Congreso bloquearía el levantamiento de sanciones y de esta manera impediría que EE.UU. cumpla su compromiso.
Alfredo Miranda, Washington.
xsh/mrk