Las fuentes de campo de Hezbolá explicaron el miércoles lo que ocurrió en la emboscada de la región de Al-Adisa, en el sur de El Líbano, donde 14 soldados israelíes murieron y varias docenas más resultaron heridos.
Según el canal libanés Al Mayadeen, en las primeras horas de la mañana del martes, los combatientes de la Resistencia libanesa monitorearon los movimientos del ejército israelí en un área descubierta frente a la localidad libanesa de Al-Adisa.
Como parte del reconocimiento de una posible ruta de avance para los soldados enemigos, los combatientes no se enfrentaron a las fuerzas israelíes al principio y les permitieron cumplir su misión.
Después, los combatientes tendieron con éxito una trampa avanzada en esta localidad en el sur de El Líbano, esperando la entrada de las fuerzas sionistas.
Al amanecer del miércoles, un grupo de las fuerzas israelíes, compuesto por más de 30 oficiales y soldados, comenzó una infiltración silenciosa en la zona de la emboscada y al llegar al punto no lejos de la frontera, los combatientes de la Resistencia los confrontaron.
Los combatientes lanzaron una lluvia de balas con sus armas ligeras, ametralladoras y granadas propulsadas por cohetes. Durante esta operación militar, muchas fuerzas israelíes murieron o resultaron heridas.
Durante estos enfrentamientos, las unidades militares del Líbano comenzaron a atacar las líneas de socorro enemigo, impidiendo así la llegada de las fuerzas enemigas para apoyar a los invasores. Los soldados quedaron atrapados en una emboscada, pero posteriormente los helicópteros israelíes entraron con el objetivo de evacuar a los muertos y heridos, lanzando bombas de humo para camuflarse.
“La Resistencia promete al enemigo lo que vio el miércoles es solo una pequeña muestra de la fuerza de los combatientes y en cada rincón de las tierras libanesas del sur del país, si se atreven a avanzar, les esperan muchas sorpresas”, subrayaron las fuentes de Hezbolá.
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