• El líder del movimiento popular yemení Ansarolá, Abdulmalik al-Houthi, ofrece un discurso.
Publicada: viernes, 23 de marzo de 2018 13:18

El líder del movimiento popular yemení Ansarolá, Abdulmalik al-Houthi, proclamó el jueves la solidaridad de Yemen con el pueblo líbanes y su disposición a luchar contra el régimen de Israel, codo con codo con el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá).

En una entrevista concedida al periódico libanés Al-Akhbar, Al-Houthi precisa que su movimiento es consciente de la cooperación existente entre los israelíes y los agresores a su país, incluidos los Emiratos Árabes Unidos (EAU), en particular para bombardear la costa yemení del mar Rojo.

“Miles de combatientes de diferentes tribus yemeníes están ansiosos por luchar contra ese régimen para responder a cualquier estupidez de Israel”, recalca refiriéndose al compromiso del movimiento que encabeza con el líder de Hezbolá, Seyed Hasan Nasrolá.

Del mismo modo, Al-Houthi asegura, pasados tres años de los incesantes ataques de Arabia Saudí y sus aliados a Yemen, los yemeníes lograrán la victoria y el reino árabe fracasará, como ya le ha ocurrido en Siria e Irak.

Miles de combatientes de diferentes tribus yemeníes están ansiosos por luchar contra ese régimen para responder a cualquier estupidez de Israel”, subraya el líder del movimiento popular yemení Ansarolá, Abdulmalik al-Houthi.

 

El dirigente guerrillero hace hincapié en la necesidad de unidad entre las naciones musulmanas frente a los ataques de EE.UU. y Occidente, y critica la indiferencia de los países árabes y la comunidad internacional ante las agresiones al país más pobre del mundo árabe.

El líder yemení también ridiculiza las “ilusiones” del príncipe heredero saudí, Mohamad bin Salman, sobre una hipotética eliminación de Ansarolá del mapa político y nacional yemení, y hace alusión a la situación que viven los yemeníes, en particular niños y mujeres, por los bombardeos de la monarquía árabe y el bloqueo que les impone.

“Cuanto más mantengan su enemistad, más aumentará nuestro poder militar y, cuanto más conspiren en Yemen, más mejorará la situación, ya que los conspiradores quedarán apartados de la gente y las amenazas se convertirán en oportunidades”, agrega.

La situación de Arabia Saudí, añade, es como la de un “idiota” que se arrastra a sí mismo con la agresión a Yemen hacia una “caída moral y humana” y, en consecuencia, hacia futuras crisis políticas, económicas y de seguridad.

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