Este martes, ha arrancado la primera etapa de los ejercicios militares conjuntos del Ejército y el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, denominados Eqtedar 1403 (Poderío), en el perímetro de la defensa aérea de la planta nuclear de Natanz, en el centro del país, según ha informado la agencia oficial de noticias IRNA.
“En esta etapa de la maniobra, las unidades de defensa aérea llevan a cabo una defensa integral del complejo nuclear Mártir Ahmadi Roshan frente a una gran cantidad de amenazas aéreas, bajo condiciones difíciles de guerra electrónica”, ha dicho el general de brigada Qader Rahimzade, comandante de la Base de Defensa Aérea Jatam Al-Anbia del Ejército.
El complejo nuclear, dedicado al enriquecimiento de uranio con fines científicos y pacíficos, funciona según los principios pacíficos del programa nuclear iraní y está bajo supervisión de los inspectores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA). La instalación de enriquecimiento subterránea de este centro está protegida por un escudo de hormigón y sofisticados sistemas de defensa aéreos.
El portavoz del Cuerpo de Guardianes, el general de brigada Ali Mohamad Naini, anunció el lunes que alrededor de 30 ejercicios terrestres, aéreos y marítimos habían comenzado en seis provincias occidentales y meridionales y detalló que las maniobras, bajo el nombre código ‘Eqtedar 1403’ continuarían hasta mediados de marzo.
El vocero castrense dijo que la República Islámica había duplicado el número de los ejercicios este año en comparación con el año pasado, “en respuesta al cambiante panorama de amenazas”. “Estos ejercicios son significativamente más grandes en alcance y sofisticación, con nuevo armamento y una participación ampliada de brigadas dedicadas a operaciones realistas”, detalló.
Las maniobras militares se producen en medio de la escalada actual en la región, derivada de la guerra genocida israelí en Gaza, dos intercambios directos de ataques entre Irán y el régimen sionista, así como las amenazas de autoridades estadounidenses e israelíes de atacar las instalaciones nucleares del país persa.
El lunes, el portavoz de la Cancillería iraní, Esmail Baqai, reaccionó a las declaraciones de Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, quien presentó opciones al saliente presidente, Joe Biden, para un posible ataque a sitios nucleares de Irán si el país se acerca a desarrollar armas nucleares antes del 20 de enero, cuando el mandatario demócrata se despide del cargo.
Baqai dijo que “la amenaza contra instalaciones nucleares pacíficas se considera una amenaza a la paz y la seguridad internacionales” y advirtió que la República Islámica “actuará con firmeza en la defensa de su soberanía nacional, integridad territorial y dignidad”.
Irán asegura que su programa nuclear es solo para fines civiles, y que el arma nuclear no tiene cabida en la doctrina de defensa del país, según una fatwa del Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, que prohíbe de manera clara la producción y uso de armamento nuclear y biológico.
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