Según un informe publicado el miércoles por el Observatorio Euro-Mediterráneo de Derechos Humanos (Euro-Med), Mohammed Iyad Tabasi, un trabajador sanitario de 24 años en un hospital de campaña en el centro de la Franja de Gaza, fue asesinado cerca de un campamento de desplazados un día antes.
Los familiares denunciaron que el servicio de espionaje israelí contactó en repetidas ocasiones a Tabasi durante el último mes, ofreciéndole incentivos económicos a cambio de información. Tras rechazar las propuestas, el joven fue asesinado en un ataque de drones minutos después de recibir una última llamada, en un claro castigo por su negativa a colaborar.
Según el informe, un vecino relató haber visto a Tabasi caminando hacia una duna cercana mientras hablaba por teléfono. Minutos después, ocurrió una explosión, y testigos hallaron su cuerpo severamente mutilado.
El Observatorio Euro-Mediterráneo declaró que su muerte constituye un “ejecución extrajudicial” y una grave violación del derecho internacional humanitario. Subrayó que Tabasi era un civil sin vínculos con grupos armados, lo que agrava la responsabilidad de Israel.
La organización también documentó múltiples testimonios que revelan un patrón de incidentes similares en los que civiles palestinos son blanco de ataques después de negarse a colaborar. Entre los relatos, detenidos palestinos reportaron haber recibido amenazas contra sus vidas o familias para forzar su cooperación.
Estas atrocidades, según la oenegé, constituyen “crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad en toda regla” bajo el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI). La CPI ya ha emitido órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y su ex ministro de asuntos militares, Yoav Gallant, por estos delitos.
El Observatorio Euro-Mediterráneo exigió investigaciones internacionales inmediatas y rendición de cuentas para los responsables.
Asimismo, un grupo de expertos de la ONU emitió el mismo miércoles una declaración conjunta, pidiendo la acción global para detener la guerra genocida que el régimen israelí lleva adelante en Gaza desde octubre de 2023.
Según fuentes médicas en el enclave, al menos 49 personas han fallecido, entre ellas 10 niños y un informador, en dos ataques perpetrados desde la tarde del martes, que tenían como objetivo a individuos desplazados.
En más de 19 meses de guerra, el régimen israelí ha causado más de 52 600 muertos y 118 000 heridos, mientras que la situación humanitaria de los palestinos empeora cada vez más.
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