Si paralizan las Corporaciones de Asistencia Judicial, se detiene la justicia. Más del 60 % de las necesidades jurídicas de Chile se atienden en estas instituciones estatales.
La mitad de los trabajadores de las corporaciones están con licencias laborales por estrés o enfermedades del trabajo. La poca dotación de personal, el exceso de causas, las extensas jornadas y las malas condiciones, incluso con oficinas que han sido cerradas por insalubres, muestra el abandono en que se encuentra el único estudio jurídico estatal que entrega asistencia jurídica gratuita.
Temen que el nuevo Servicio de Acceso a la Justicia que el gobierno tramita en el Congreso y se sustenta en estas corporaciones nazca sin recursos ni dotación suficiente.
40 años llevan estos trabajadores denunciando la precariedad y en 2019 protagonizaron el paro más largo de un servicio público desde el fin de la dictadura. Hasta ahora, no hay respuestas.
La paralización es de carácter indefinido y se mantendrá así hasta que este gobierno cumpla su promesa de mejores condiciones laborales para sus trabajadores y de acceso a la justicia para millones de personas.
Beatriz Michell, Santiago de Chile.
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