Las Organizaciones Sindicales Centrales de la India (CTUO, por sus siglas en inglés), que representan aproximadamente a 100 millones de trabajadores, han condenado enérgicamente las conversaciones entre Nueva Delhi y el régimen de Tel Aviv para un “acuerdo de exportación” de hasta 100 000 trabajadores indios con el objetivo de reemplazar a los palestinos en los territorios usurpados por Israel.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de la India ha confirmado que ambas partes han estado involucradas en discusiones para un marco bilateral de movilidad y migración, particularmente en sectores de construcción y servicios.
En un comunicado publicado la semana pasada, la plataforma de sindicatos y federaciones independientes apuntó a un acuerdo firmado entre ambos lados en mayo de 2023 durante una visita del ministro de exteriores del régimen de Israel, Eli Cohen, en virtud del cual, la India enviaría 42 000 trabajadores a Israel.
“El Gobierno indio está desempeñando un papel despreciable al apoyar los planes israelíes de expulsar a los trabajadores palestinos... Nada podría ser más inmoral y desastroso para la India que la mencionada “exportación” de trabajadores a Israel. El hecho de que India esté siquiera considerando “exportar” mano de obra muestra la manera en que ha deshumanizado y mercantilizado a los trabajadores indios”, se lee en el comunicado.
“Semejante medida equivaldrá a la complicidad de la India con la actual guerra genocida de Israel contra los palestinos”, añadió.
En su declaración, las CTUO también condenaron la posición “poco ética y engañosa” adoptada por el Gobierno de Narendra Modi sobre la guerra de Israel en Gaza debido a su solidaridad con el régimen ocupante y abstenerse de apoyar la resolución de la ONU para un alto el fuego.
La plataforma conjunta ha exigido que se elimine inmediatamente el acuerdo propuesto para enviar trabajadores indios a Israel, que se ponga fin de inmediato a la agresión israelí contra Palestina, que sea terminada la ocupación y que se respete el derecho palestino a una patria soberana como único camino a la paz.
Además, llamó a la clase trabajadora india a no reemplazar a los palestinos, boicotear los productos israelíes y unirse a sus homólogos de otros países para negarse a manejar cargamento israelí, en solidaridad con el llamado internacional en rechazo al genocidio israelí en la sitiada Franja de Gaza.
En un informe publicado el 6 de noviembre, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) indicó que al menos el 61 % del empleo, o 182 000 puestos de trabajo, habían sido eliminados en Gaza desde el 7 de octubre.
La Cisjordania ocupada, que Israel también convirtió en una fuente de mano de obra barata y explotada después de 1967 y el proceso de Oslo de la década de 1990, ha sido testigo de pérdidas de empleo del 24 % o 208 000 puestos de trabajo. Los daños infligidos tanto a Gaza como a Cisjordania ascienden a 16 millones de dólares en pérdidas de ingresos laborales diarios.
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