• Una vista de Teherán, capital de Irán
Publicada: sábado, 10 de mayo de 2025 17:51

Irán se ha situado entre los países con un alto índice de desarrollo en el Informe sobre Desarrollo Humano 2025 del Programa de Naciones Unidas para Desarrollo (PNUD).

El Índice de Desarrollo Humano (IDH) es un importante indicador del desarrollo humano que elabora cada año Naciones Unidas, lo cual abarca los logros en salud y educación, así como los niveles de ingresos.

Según el informe, el IDH de Irán se sitúa este año en 0,779, frente al 0,780 de 2024, ocupando el puesto 75 entre 193 países y territorios. Esto sitúa al país en la categoría de “Alto Desarrollo Humano”.

Irán ha alcanzado un aumento significativo de desarrollo entre 1990 y 2023, cuando el valor del IDH del país pasó de 0,626 a 0,799, lo que supone un aumento del 27,6 %.

Esta mejora se produce pese a las estrictas sanciones impuestas al país por algunos Estados occidentales, en particular Estados Unidos, que han afectado duramente a la nación iraní, provocando un aumento de los precios en todo tipo de bienes, desde productos básicos y de consumo hasta la vivienda.

Mejorar el IDH está directamente relacionado con los logros en el desarrollo humano y económico de una sociedad. La alfabetización y educación están directamente relacionadas con el desarrollo de las naciones.

En Irán, el movimiento de alfabetización, iniciado por orden del difunto fundador de la República Islámica, el Imán Jomeini (que en paz descanse), tras la victoria de la Revolución Islámica (1979), impulsó el desarrollo del país. Antes de la Revolución, durante la monarquía de Pahlavi, apoyada por Occidente, más de la mitad de la población iraní mayor de seis años era analfabeta.

Según funcionarios de la Organización del Movimiento de Alfabetización de Irán, la tasa de alfabetización en el país ha alcanzado el 97,1 % en el grupo de edad de 10 a 49 años por primera vez, lo que sitúa al país prácticamente en la alfabetización plena.

La relación entre el nivel educativo, la alfabetización y el crecimiento económico se ha intensificado en la actual economía global basada en la tecnología. Los estudios han demostrado que la inversión en educación es tres veces más importante para el crecimiento económico a largo plazo que la inversión en capital físico, como maquinaria y equipo.

Según estudios, el nivel educativo es fundamental para el bienestar y el desarrollo de las naciones. Entre 1976 y 2016, el mundo experimentó un crecimiento del 20% en la tasa de alfabetización, la tasa fue de aproximadamente el 50% en Irán durante el mismo período, según el Banco Mundial (BM).

El crecimiento del número de mujeres educadas en Irán también es uno de los logros brillantes de la Revolución. Antes de 1979, más del 60% de las mujeres iraníes eran analfabetas, mientras que, en la actualidad, más del 60% de los estudiantes universitarios de primer año son mujeres.

Pese al progreso del país en todos los ámbitos durante los últimos 46 años, la propaganda occidental típica ha sido retratar al país sumido en la miseria.

 

Tras la Revolución Islámica la atención a los oprimidos, quienes fueron marginados por el modelo de desarrollo desigual de la monarquía prooccidental, ha aumentado considerablemente.

El cambio de las políticas de Mohamadreza Pahlavi, el último Shah de Irán, centradas en la élite a la igualdad de oportunidades para los desfavorecidos tras la Revolución incluyó la expansión de la infraestructura y los servicios básicos como electricidad, agua potable, atención médica y educación a todos los rincones del país.

La expansión y distribución equitativa de la salud y la educación condujo a una de las reducciones más rápidas de los niveles de pobreza, donde la tasa de pobreza del 25 % en la década de 1970 se redujo a menos del 10 % en 2014.

Si bien la población se ha duplicado, la mayoría de los iraníes hoy disfrutan de acceso a servicios básicos e infraestructura, a diferencia de antes de la Revolución.

Por supuesto, también existen algunas tendencias preocupantes. Junto con los cambios en la distribución de la riqueza, el acceso de ciertos sectores a las rentas —resultado de la neoliberalización de diversas políticas económicas iraníes desde la década de 1990— ha propiciado el surgimiento de algunos nuevos ricos.

Sin embargo, el panorama general es positivo, como lo demuestra claramente el Informe sobre Desarrollo Humano 2025 del PNUD.

El informe titulado “Una cuestión de elección: personas y posibilidades en la era de la Inteligencia Artificial (IA)” subraya cómo la IA podría impulsar el desarrollo en las naciones.

De cara al futuro, Irán tiene el potencial de crear nuevas oportunidades de inversión aprovechando la Inteligencia Artificial para impulsar las innovaciones científicas y tecnológicas.

Adoptar un enfoque estratégico con especial énfasis en la igualdad de acceso de mujeres y niñas a la educación, el empleo y los servicios de salud puede contribuir eficazmente a mejorar significativamente este indicador.

ftm/hnb