“Estamos muy preocupados por el aumento de las tensiones en la región del Golfo Pérsico. Podemos ver que algunos de nuestros colegas occidentales están tratando de escalar la situación”, ha dicho este lunes el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en una reunión con su homólogo iraní, Mohamad Yavad Zarif.
El jefe de la Diplomacia rusa ha señalado que tanto Rusia como Irán se oponen a tales intentos al pedir una cooperación igual y mutuamente beneficiosa en esta importante región.
Por ello, ha añadido que Moscú en su día presentó un plan para garantizar la seguridad regional similar al planteado por Teherán con su propuesta de la Iniciativa de Paz de Ormuz.
Ambas propuestas, ha proseguido, “están destinadas a aunar esfuerzos para estabilizar la situación en la región”, ya que con su puesta en marcha aplacaría las tensiones y establecería la paz en la zona.
Conforme Lavrov, estos planteamientos son un paso en la dirección correcta para lograr tales objetivos que tanto Moscú como Teherán los defienden ante la comunidad regional e internacional.
Este encuentro se ha producido al día siguiente de haberse finalizado las maniobras navales conjuntas de Irán, Rusia y China denominadas ‘Cinturón de Seguridad Naval’ en la ciudad portuaria de Chabahar, situada en las costas surorientales iraníes del mar de Omán.
Estas maniobras trilaterales se realizaron en un momento en el que Washington intenta forjar una llamada coalición, so pretexto de proporcionar seguridad marítima cerca de las aguas de Irán, es decir, el Golfo Pérsico, tras unos incidentes en la región de los cuales EE.UU. y el Reino Unido culparon a Teherán.
Por su parte, la República Islámica ha negado en repetidas ocasiones su participación en tales actos y ha advertido de los intentos de Washington por crear inseguridad en el Golfo Pérsico y el estratégico estrecho de Ormuz, e instrumentalizarlos como excusa a fin de aumentar su presencia militar en esta zona.
Estados Unidos en uno de sus intentos por desestabilizar una vez más la región, bombardeó el domingo varias posiciones de las fuerzas de Al-Hashad Al-Shabi, que forman parte de las Fuerzas Armadas iraquíes, en el distrito occidental de Al-Qaim, en la provincia de Al-Anbar, y dejó varios muertos. Una medida hostil condenada por los gobiernos de Irak, Irán y Rusia.
En otra parte de su encuentro, ambos diplomáticos abordaron temas de cooperación para resolver el problema de Siria, así como, relaciones bilaterales. “Sería útil intercambiar puntos de vista sobre los acontecimientos en Siria y sobre nuestros esfuerzos para resolver la crisis siria, incluida la cooperación dentro del proceso de Astaná”, ha expresado el titular ruso a su invitado persa.
En el marco por reforzar los lazos bilaterales entre Teherán y Moscú, Lavrov ha indicado que los correspondientes departamentos seguirán tratando estos temas, incluidos los relacionados con el comercio, la cooperación económica y humanitaria, según los acuerdos sellados por sus respectivos presidentes ruso e iraní, Vladimir Putin y Hasan Rohani, para contrarrestar las sanciones de EE.UU.
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